Estos fantásticos pendientes son una réplica del encontrado en el tesoro de Zawada Lanckorońska, un pequeño pueblo polaco. Están datados de finales del siglo X.
Hay múltiples hallazgos de este tipo de pendientes, de formas muy variadas, especialmente en Polonia, República Checa y Eslovaquia. Se utilizaron hasta el siglo XII.
También se conocen como "anillos de sien", puesto que las mujeres solían usarlos para decorar sus tocados y se enganchaban en el pelo o en tiras tejidas a la altura de la sien.
También se podrían utilizar como pendientes modernos.